Ayuntamiento de Marmolejo "Programa Procare Marmolejo"

23 Septiembre, 2025

1.    DENOMINACIÓN DE LA ACTIVIDAD/PROGRAMA/PROYECTO:

PROGRAMA PROCARE MARMOLEJO

2.    DATOS BÁSICOS DEL PROYECTO:

Durante los cursos escolares 2023/2024 y 2024/2025, el municipio de Marmolejo ha impulsado el desarrollo del programa PROCARE, una intervención pionera centrada en la salud mental y el bienestar emocional de la población adolescente, concretamente del alumnado de entre 12 y 18 años. Esta iniciativa, liderada por el Ayuntamiento de Marmolejo en colaboración con los centros educativos locales y profesionales del ámbito psicosocial, nace como respuesta a una preocupación creciente: la necesidad de atender de forma específica y estructurada la salud mental de los y las jóvenes en un contexto cada vez más complejo y desafiante.

El programa PROCARE se articula desde un enfoque preventivo, comunitario e inclusivo, abordando la salud mental desde una perspectiva integral. Se ha diseñado como un itinerario de diagnóstico, acompañamiento y promoción del bienestar emocional adaptado a las necesidades reales del colectivo adolescente, situando su voz y sus vivencias en el centro del proceso.

2.1 Contexto

En los últimos años, tanto a nivel nacional como internacional, se ha producido un aumento significativo de los problemas de salud mental entre adolescentes. El impacto de la pandemia por COVID-19, la presión académica, las dinámicas familiares complejas, el uso intensivo de las redes sociales o la falta de espacios seguros de expresión emocional son algunos de los factores que han contribuido a esta situación. En municipios rurales como Marmolejo, esta realidad se acentúa por la limitada disponibilidad de recursos específicos de atención psicológica y por una menor visibilidad social de los trastornos emocionales en edades tempranas.

El sistema educativo local ha detectado un aumento de las manifestaciones de malestar psicológico, ansiedad, bajo estado de ánimo, desmotivación, problemas de conducta o dificultades en las relaciones interpersonales entre el alumnado adolescente. A ello se suma la demanda creciente del profesorado y las familias de contar con herramientas y recursos para comprender y acompañar mejor a los jóvenes en esta etapa crítica del desarrollo.

2.2 Justificación de la Necesidad

El diagnóstico inicial realizado en el marco del programa PROCARE ha evidenciado la necesidad urgente de actuar de forma coordinada y sostenida en el tiempo. A través de cuestionarios emocionales, entrevistas, sesiones de tutoría y espacios grupales de diálogo, se ha puesto de manifiesto que una parte significativa del alumnado de Marmolejo presenta síntomas relacionados con la ansiedad, el estrés académico, la falta de autoestima y la dificultad para gestionar emociones básicas como la frustración, la tristeza o la ira.

En conclusión, el programa PROCARE Marmolejo se justifica no solo por la urgencia del diagnóstico realizado, sino por el compromiso institucional con la salud mental como derecho básico y como factor determinante para el desarrollo integral de la juventud local. Su continuidad y consolidación suponen una apuesta valiente por situar el cuidado emocional en el centro de las políticas públicas de juventud y educación.

3.    OBJETIVOS:

  • Objetivo General

Promover el bienestar emocional y la salud mental del alumnado de entre 12 y 18 años del municipio de Marmolejo, a través de una intervención integral, participativa y comunitaria que combine el diagnóstico emocional, la sensibilización, la formación y la implementación de estrategias preventivas en el entorno educativo y social.

  • Objetivos Específicos

1.    Diagnosticar el estado emocional del alumnado adolescente de Marmolejo mediante herramientas validadas y procesos de escucha activa que permitan detectar necesidades, factores de riesgo y fortalezas emocionales individuales y colectivas.
2.    Fomentar entornos escolares seguros, afectivos y emocionalmente saludables mediante la implementación de acciones que fortalezcan la convivencia, la empatía y el respeto dentro de la comunidad educativa.
3.    Sensibilizar a la población juvenil, familias, personal docente y comunidad en general sobre la importancia de la salud mental, superando estigmas y generando una cultura del cuidado emocional.
4.    Formar al profesorado, familias y agentes sociales en competencias emocionales básicas y herramientas de acompañamiento adolescente, promoviendo su implicación activa en la prevención de situaciones de malestar psicosocial.
5.    Favorecer la participación juvenil en el diseño y ejecución de acciones vinculadas al bienestar emocional, reconociendo a los y las jóvenes como protagonistas de su desarrollo personal y comunitario.
6.    Desarrollar estrategias de intervención temprana ante posibles situaciones de riesgo emocional, facilitando el acceso a recursos de apoyo psicológico y derivación profesional cuando sea necesario.
7.    Evaluar de forma continua el impacto del programa en la salud emocional del alumnado, adaptando las intervenciones a las necesidades emergentes y asegurando su sostenibilidad en el tiempo.
8.    Construir una red local de apoyo interinstitucional que articule el trabajo conjunto entre centros educativos, servicios sociales, entidades juveniles y profesionales del ámbito sanitario y psicosocial.

4.    ÁREA DE INTERÉS EN EL TRABAJO CON JÓVENES:  

El área de interés prioritario en el trabajo con jóvenes desde nuestro enfoque institucional y comunitario es, sin duda, la salud de la juventud, entendida en un sentido amplio e integral. Apostamos por una visión de la salud que va más allá del ámbito físico, abarcando también el bienestar emocional, psicológico y social de los y las jóvenes.

Este compromiso se traduce en el impulso de programas como PROCARE Marmolejo, que sitúan la salud mental y el cuidado emocional en el centro de las políticas de juventud. Trabajar por la salud de la juventud implica crear entornos seguros, ofrecer herramientas para la gestión emocional, promover hábitos de vida saludables y garantizar el acceso equitativo a recursos de apoyo, especialmente en una etapa vital marcada por múltiples desafíos.

En este marco, la salud juvenil no se concibe como un área complementaria, sino como un eje transversal que condiciona el desarrollo pleno, la participación activa y la emancipación de la juventud en nuestros municipios.

5.    PARTICIPANTES Y/O PERSONAS BENEFICIARIAS:

El programa PROCARE Marmolejo ha tenido como personas participantes y beneficiarias principales a toda la juventud adolescente del municipio con edades comprendidas entre los 12 y los 18 años, abarcando así al alumnado de los centros educativos locales de Educación Secundaria Obligatoria y postobligatoria. Esta franja de edad representa una etapa crucial en el desarrollo personal, social y emocional, en la que es fundamental contar con recursos que acompañen y orienten los cambios propios de la adolescencia.
Desde su diseño, PROCARE ha apostado por una intervención de carácter universal, garantizando el acceso al programa a toda la población adolescente del municipio, sin distinciones, lo que ha permitido ofrecer una mirada amplia y representativa sobre el estado emocional de la juventud de Marmolejo. Esta cobertura total ha sido clave para identificar tanto factores de riesgo como fortalezas colectivas, así como para generar un impacto positivo en toda la comunidad educativa.

Además de los y las jóvenes, el programa ha contado con la implicación activa de las familias, reconociendo su papel fundamental como agentes de apoyo y acompañamiento emocional. A través de sesiones formativas, espacios de sensibilización y herramientas prácticas, las familias han podido adquirir competencias para comprender mejor los cambios emocionales de sus hijos e hijas y para fomentar entornos de escucha, diálogo y apoyo en el hogar.

En conjunto, PROCARE ha logrado crear un ecosistema de cuidado emocional que vincula a adolescentes, familias, centros educativos y profesionales del ámbito psicosocial, consolidando una red de apoyo comprometida con el bienestar de la juventud marmolejeña.

6.    METODOLOGÍA:

El programa PROCARE Marmolejo ha seguido una metodología estructurada en fases que permite abordar de forma integral el bienestar emocional de la adolescencia local. Previamente a la implantación de estas fases, el Ayuntamiento de Marmolejo, en colaboración con la Universidad de Jaén y el IES Virgen de la Cabeza, desarrolló una campaña de sensibilización y visibilidad con el objetivo de informar, implicar y preparar a la comunidad para una participación activa en el programa.

Entre estas acciones previas destacan el envío de cartas personalizadas a los domicilios de los adolescentes, explicando los objetivos y beneficios del programa; la organización de reuniones con familias durante los horarios de tutoría, generando espacios de confianza para resolver dudas y motivar la colaboración; así como la elaboración de materiales promocionales adaptados a diversos formatos y canales, difundidos a través de redes sociales, medios de comunicación local y en espacios públicos. Asimismo, se realizaron entrevistas con el personal técnico y académico de la Universidad de Jaén, entidad responsable de la coordinación científica del programa, lo que permitió reforzar el carácter riguroso y profesional de la intervención.

Una vez finalizada esta fase de preparación comunitaria, se implantaron las tres fases metodológicas que estructuran el desarrollo de PROCARE:

Fase 1: Diagnóstico emocional inicial

Durante esta etapa, se aplicaron instrumentos estandarizados y confidenciales para identificar el estado emocional de cada participante. A través de cuestionarios psicométricos y entrevistas breves, se evaluaron aspectos como la autoestima, el estado de ánimo, la gestión emocional, las relaciones sociales o la percepción de apoyo. Este diagnóstico permitió obtener una radiografía emocional del alumnado y detectar posibles factores de riesgo psicosocial.

Fase 2: Talleres y actividades formativas

Con base en los resultados del diagnóstico, se diseñaron y aplicaron talleres dirigidos al alumnado sobre temas clave como la gestión de emociones, el autocuidado, las habilidades sociales o la prevención de conductas de riesgo. Estos talleres se desarrollaron en formato participativo, utilizando metodologías activas y adaptadas a la realidad del grupo. Paralelamente, se ofrecieron sesiones formativas a familias y profesorado, dotándoles de herramientas prácticas para acompañar emocionalmente a los y las jóvenes.

Fase 3: Evaluación y seguimiento

La última fase consistió en una evaluación del impacto de la intervención, recogiendo indicadores de mejora emocional, satisfacción de participantes y propuestas de mejora. También se realizaron sesiones de retorno en los centros educativos, compartiendo los principales hallazgos y reforzando el compromiso colectivo con la continuidad del programa.

En su conjunto, la metodología de PROCARE Marmolejo se ha caracterizado por su rigor técnico, su enfoque comunitario y su capacidad de adaptación a las necesidades reales de la juventud del municipio, consolidando un modelo de intervención emocional sostenible y transformador.

7.    PRINCIPALES ACTIVIDADES Y TEMPORALIZACIÓN DE ESTAS:

El desarrollo del programa PROCARE Marmolejo se ha organizado en torno a una planificación por fases, que permite estructurar de forma coherente las distintas actividades e intervenciones. Cada fase se ha implantado con una temporalización clara, garantizando así un seguimiento continuo y adaptado a los ritmos del curso escolar.

La primera gran actividad fue la campaña informativa y de sensibilización, llevada a cabo durante el mes de septiembre. En este periodo se lanzaron distintas acciones destinadas a dar a conocer el programa a la comunidad educativa y a las familias. Se enviaron cartas informativas personalizadas a los domicilios de los y las adolescentes participantes, se realizaron reuniones con familias en los centros educativos durante las tutorías y se generaron materiales promocionales difundidos a través de redes sociales, medios locales y canales institucionales. Además, se realizaron entrevistas con el equipo investigador de la Universidad de Jaén, responsable del diseño y coordinación del programa, lo que contribuyó a fortalecer la confianza de la comunidad en el proyecto.

A continuación, se desarrolló la 1.ª fase del programa, centrada en el diagnóstico emocional inicial, que se llevó a cabo desde el inicio del curso escolar hasta el 22 de diciembre de cada año. Durante este tiempo se aplicaron herramientas de evaluación psicológica y emocional al alumnado participante, con el fin de obtener una visión precisa de su estado emocional y detectar necesidades o posibles factores de riesgo. Esta fase sentó las bases para el diseño personalizado de las siguientes acciones.

La 2.ª fase se desarrolló desde enero hasta los meses de marzo o abril, dependiendo del calendario del centro educativo. En esta etapa se llevaron a cabo talleres de educación emocional adaptados al nivel evolutivo del alumnado, trabajando aspectos como la autoestima, la gestión emocional, la empatía, el autocuidado o las relaciones interpersonales. Los talleres se diseñaron de forma práctica y participativa, fomentando la implicación directa de los y las jóvenes. Además, se ofrecieron acciones formativas específicas para las familias y el profesorado, con el objetivo de reforzar su capacidad de acompañamiento emocional y construir una red de apoyo compartida.

Finalmente, la 3.ª fase corresponde al seguimiento y evaluación del impacto. Esta fase se realiza en dos momentos clave: a los seis meses y al año de la finalización de los talleres, permitiendo así analizar la evolución emocional del alumnado, identificar mejoras y ajustar futuras intervenciones. Se incluyen encuestas de satisfacción, valoraciones cualitativas y reuniones de retorno en los centros.

Esta planificación por fases ha permitido que PROCARE Marmolejo se desarrolle de manera ordenada, adaptada al curso escolar y con una visión de continuidad, consolidándose como una intervención de referencia en el ámbito de la salud emocional adolescente.

8.    RECURSOS HUMANOS:

El programa PROCARE Marmolejo ha contado con un equipo multidisciplinar de profesionales y agentes locales cuya colaboración ha sido fundamental para su correcta implementación, seguimiento y evaluación. La coordinación y el desarrollo de las distintas fases del programa han estado respaldados por un conjunto de recursos humanos que representan el compromiso colectivo del municipio con la salud mental de su juventud.

En primer lugar, han participado personas expertas de la Universidad de Jaén, pertenecientes a la Red PROEM y al equipo técnico del Programa PROCARE, quienes han liderado el diseño metodológico, el diagnóstico emocional del alumnado, la elaboración de materiales y la evaluación científica del impacto del programa. Su experiencia en el ámbito de la salud mental y su estrecha vinculación con el entorno educativo han sido clave para garantizar la calidad y la solidez técnica de la intervención.

Junto a este equipo investigador, ha jugado un papel fundamental el personal técnico y político del Ayuntamiento de Marmolejo, especialmente desde el Área de Juventud, que ha impulsado, coordinado y dado soporte logístico a todas las acciones del programa. Su labor ha incluido tanto la organización de reuniones con la comunidad educativa y las familias como la gestión de recursos y la difusión pública de la iniciativa.

Asimismo, el equipo directivo del IES Virgen de la Cabeza, el departamento de orientación y la enfermera de referencia del centro educativo han estado plenamente implicados desde el inicio, colaborando en la organización de las sesiones, la detección de necesidades y la coordinación con las familias. Su compromiso ha sido esencial para integrar el programa en la dinámica escolar y facilitar la participación activa del alumnado.

Además, desde el ámbito municipal se ha contado con el apoyo del personal de Radio y Televisión de Marmolejo, así como del Gabinete de Comunicación del Ayuntamiento, quienes han contribuido a la difusión informativa del programa mediante la cobertura de entrevistas, campañas visuales y la divulgación de contenidos en medios locales y redes sociales.

En conjunto, la suma de estos perfiles profesionales y su trabajo coordinado han permitido consolidar a PROCARE Marmolejo como una experiencia de referencia en salud emocional adolescente, construida desde lo local pero con visión científica, comunitaria y transformadora.

9.    RECURSOS MATERIALES/ESPACIOS:

Para la correcta implantación del programa PROCARE Marmolejo, se han utilizado diversos recursos materiales y espacios municipales y educativos que han facilitado tanto el desarrollo de las fases de evaluación como la implementación de los talleres y las actividades de difusión y seguimiento.

Entre los recursos materiales, destacan los materiales publicitarios y de sensibilización, diseñados para dar visibilidad al programa y fomentar la participación del alumnado y sus familias. Estos materiales incluyeron carteles informativos, dípticos y publicaciones adaptadas a redes sociales y medios locales, elaborados con un enfoque accesible y atractivo para el público adolescente. Asimismo, se utilizaron formularios impresos, especialmente en la fase inicial de evaluación, para aquellas familias que requerían una versión física del consentimiento informado o de los cuestionarios, garantizando así la equidad en el acceso a la información y la participación.

En cuanto a los espacios físicos utilizados, el programa ha contado con el apoyo del IES Virgen de la Cabeza, donde se han cedido las aulas de informática para facilitar la cumplimentación del cuestionario online por parte del alumnado, especialmente en aquellos casos donde existía alguna dificultad tecnológica o necesidad de acompañamiento técnico. Estos espacios han sido esenciales para asegurar que todos los y las adolescentes tuvieran la oportunidad de participar en condiciones adecuadas.

Por otro lado, se ha contado también con la Casa de la Juventud de Marmolejo como espacio de apoyo logístico y punto de encuentro para la coordinación del programa, así como para la realización de reuniones informativas, sesiones con familias y entrevistas personalizadas. Este equipamiento juvenil se ha consolidado como un entorno de referencia para los jóvenes del municipio y ha desempeñado un papel clave como infraestructura de respaldo durante el desarrollo del proyecto.

En conjunto, la utilización de estos recursos materiales y espacios ha permitido que el programa PROCARE se desarrolle con garantías de calidad, accesibilidad y cobertura, facilitando el trabajo coordinado entre el ámbito educativo, el municipal y el equipo técnico responsable de la intervención.

10.    RESULTADOS Y EVALUACIÓN:

El programa PROCARE Marmolejo ha sido implementado en dos ediciones consecutivas con el objetivo de detectar precozmente y prevenir problemas emocionales entre adolescentes de 12 a 18 años del municipio. Los resultados de ambas ediciones evidencian una elevada participación, altos niveles de satisfacción y mejoras significativas en indicadores clave de bienestar emocional.

En la primera edición (curso 2023/2024), 95 adolescentes completaron el proceso de evaluación inicial. De ellos, un 44,2% se encontraba emocionalmente sano, un 30,5% en riesgo bajo (selectiva), un 13,7% en alto riesgo (indicada) y un 11,6% presentaba sintomatología clínica. Tras la devolución de resultados, se llevaron a cabo entrevistas diagnósticas con 19 adolescentes en situación de riesgo elevado. De estos, 13 se incorporaron a los talleres PROCARE-I+ (alto riesgo) y 3 adolescentes completaron los talleres PROCARE+ (bajo riesgo).

Los participantes en PROCARE+ presentaron una asistencia del 100%, una participación media del 83,3% y una satisfacción global del 83,35%. En los módulos adicionales dirigidos a factores de riesgo como bullying, adicciones tecnológicas, hábitos de vida y estrés, también se alcanzaron niveles de asistencia y satisfacción superiores al 85%. Las mejoras observadas tras la intervención fueron destacables: reducción del 65% en el malestar emocional, del 80% en el riesgo de desarrollar un problema emocional, e incrementos del 67% en resiliencia y del 89% en calidad de vida.

En cuanto a PROCARE-I+, los 11 adolescentes participantes finalizaron el programa, con una asistencia media del 95,5% y una participación del 85,8%. La satisfacción fue aún mayor, con una media del 88,5%. Los avances tras la intervención fueron igualmente relevantes: disminución del 83% en malestar emocional, del 90% en riesgo emocional futuro, y mejoras de entre el 76% y el 89% en regulación emocional, resiliencia, calidad de vida y flexibilidad psicológica. Además, algunos adolescentes con puntuaciones clínicas al inicio mejoraron a estados de bajo riesgo o emocionalmente sanos.

En la segunda edición (curso 2024/2025), 90 adolescentes participaron en el screening emocional. Un 61,1% se encontraba emocionalmente sano, un 24,4% en riesgo bajo, un 11,1% en riesgo alto y un 3,3% con sintomatología clínica. Se ofrecieron talleres a los perfiles indicados y selectivos. En PROCARE+, 7 adolescentes completaron el programa, con una asistencia del 96%, participación del 62% y satisfacción del 82%. Las mejoras reportadas incluyen un 92% en reducción del malestar emocional, 94% en riesgo futuro y 93% en calidad de vida. En PROCARE-I+, la única adolescente participante completó el 100% de las sesiones, con un 56% de participación y un 85% de satisfacción, presentando mejoras en todas las dimensiones evaluadas.

Ambas ediciones destacan la utilidad del modelo de prevención emocional propuesto, mostrando impacto positivo tanto en adolescentes en riesgo como en aquellos con sintomatología incipiente. Los resultados justifican la continuidad del programa y su potencial como modelo replicable en otros contextos locales.

INFORMACIÓN OPCIONAL:

•    Material audiovisual:
https://fb.watch/zQdFfFRCXZ/
https://fb.watch/zQdH748tTL/
https://fb.watch/zQdI1URxvA/
https://fb.watch/zQdLfdGW0Y/
https://fb.watch/zQdQyMuUUM/